Después de los 80.000 km, es imprescindible llevar el vehículo a un taller autorizado para realizar la revisión preventiva del catalizador. Prestar atención a algunos detalles importantes puede garantizar que la pieza siga funcionando perfectamente y siga transformando los gases contaminantes en productos menos dañinos para la atmósfera.
Básicamente, los aspectos observados durante este proceso se refieren a la instalación correcta, la integridad de la pieza (si se pueden detectar deformaciones o roturas causadas por golpes o raspaduras en el suelo), el nivel de calor y las posibles fugas.
Todos estos factores pueden tener causas distintas y afectar negativamente el funcionamiento del catalizador. Es importante analizar cada uno por separado para que la revisión sea completa y satisfactoria.
Integridad de la pieza
La inspección visual a menudo puede revelar deformaciones que pueden afectar el rendimiento del catalizador. Por ejemplo, una distancia incorrecta entre el suelo y el piso del vehículo es uno de los factores que pueden aumentar las posibilidades de impactos y grietas.
También es importante verificar la instalación del catalizador, asegurándose de que los conos de entrada y salida de gases estén en la posición correcta, así como las posiciones y conexiones de la sonda.
Nivel de calor
El exceso de calor puede provocar la fusión de la cerámica interna de la pieza y evitar que ocurran las reacciones químicas que transforman los gases contaminantes en sustancias menos perjudiciales para el medio ambiente. Para detectar este aspecto, durante la revisión, el mecánico puede usar un martillo u otra herramienta para golpear suavemente la pieza y verificar si produce un sonido amortiguado, lo que indicaría que la cerámica está intacta.
El aumento de la temperatura considerada ideal también puede ser causado por la obstrucción de componentes, provocada por un exceso de combustible en la mezcla, lo que puede quemarse fuera de la cámara de combustión y, en consecuencia, corroer la cerámica del catalizador. Durante la revisión, el termómetro es una herramienta esencial para el mecánico.
Fugas
El torque de los componentes del sistema de escape también debe ser observado durante la revisión. La holgura en alguna etapa anterior puede causar fugas de gases antes de que el catalizador entre en acción. De esta manera, los gases no tratados serán expulsados a la atmósfera con niveles de contaminantes muy por encima de los regulados.
Las fugas también afectan la proporción ideal de la mezcla aire-combustible y la contrapresión de los gases, lo que hace que el catalizador no funcione correctamente.
Las revisiones periódicas bien ejecutadas y que respeten los intervalos definidos por los fabricantes prolongan la vida útil del catalizador, reduciendo los costos de mantenimiento y reemplazo, además de preservar otros componentes relacionados.
Si es necesario reemplazar la pieza, siempre busque catalizadores probados y homologados por el INMETRO, con origen y calidad reconocidos. Elija la marca que fabrica uno de cada tres sistemas de escape de reposición vendidos en Brasil. Visite el sitio web y conozca los modelos de sistemas de escape y catalizadores fabricados por Tuper.
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